jueves, 28 de febrero de 2013

Día de Andalucía o de las "chuminás"


"Hoy estoy guarnía. Y lo que más me gusta de estar guarnía es poder decir que estoy guarnía... Es una expresión que me encanta... como tantas otras que son tan nuestras. Como cuando una se harta de comer y acaba engollipá (o engoñipá) o cuando riegas las macetas más de la cuenta y las dejas enguachinás... Yo nunca pido churros, sino calentitos... de niña nunca iba a las atracciones, sino a los cacharritos... a los amigos pesados se les dice jartible y cuando me tangaba del colegio lo que hacía era rabona... (qué peyas ni peyas). A lo largo de mi vida he conocido a más apollardaos que tontos y a más esnortaos que despistados... pero nunca a ningún antipático, sólo a malajes o saboríos... La mentira no es mentira sino engañifa. Aquí lo mucho es una jartá o una pechá, y lo poco es una mijita... y la gente no pasea, da vuerta... Lo que está muy sucio está empercochao y lo que limpias a fondo lo dejas escamondao o niquelao... Si se te va la olla te quedas majarón, y si das mucho la lata te llaman pejiguera... Los borrachos, que son papaos, no deambulan, sino que dan camballás... y la gente no odia la mentira, sino el falserío... Lo roto está descuajaringao y lo pasado de fecha, revenío... los cobardes son jiñaos y lo muy visto está mu manío... (y que conste que lo que acabo de soltar no es ninguna tontería, sino una chuminá)".


El 28 de febrero, en recuerdo del referendum de 1980, se celebra el Día de Andalucía. Otra chuminá autonómica para añadir a la lista. Cuando estaba en el colegio, cada 28 de febrero, nos regalaban un Plastidecor verde y nos mandaban colorear la bandera de Andalucía. Parajódicamente, nunca nos dieron una cera roja y otra amarilla para pintar la de España... Minimeces. Hasta los 15 años tampoco estudié una capital, un río, una cordillera o un cabo que estuvieran más allá de la frontera andaluza... El mundo acababa en Sierra Morena. A partir de ahí, la vida era un agujero negro.


Otra tradición escolar del 28 de febrero consistía en cantar el himno de Andalucía con las lágrimas asomando en recuerdo de Blas Infante. Jamás comprendí la letra: si los andaluces pedíamos libertad y tierra, ¿no podíamos encontrar un terrenito majo más allá de Sierra Morena? En Murcia, sin ir más lejos. Y lo de "andaluces, levantaos" era un cuento de mucha consideración: ¡si nos repele madrugar! Pero todos estos pensamientos infantiles debía guardármelos so pena de recibir una clase extra de Patrimonio Artístico Andaluz.


A Andalucía, Carlos Cano le compuso una canción, mucho más hermosa, por supuesto, que la escrita por Blas Infante, y que debería ser su verdadero himno: "Verde, blanca y verde".


El repertorio de Carlos Cano está cuajado de himnos a Andalucía. ¡Te quie´ir ya, Blas Infante y toda su casta de adoctrinadores! Que pongan en los colegios "Andalucía Superstar", "La murga de los currelantes" o "Verigüe fandango". ¡Vamos que nos vamos!

"¡La Reina Superstar! ¡Viva Andalucía Libre!
-alimento principal-, que viene pidiendo tierra y la tierra abandoná.
Ay, palomas que van a Cai y Cai como un palomar.
¿Qué habrá pasao en la carretera?
¿Qué habrá pasao?
Que pa ir a Cai hay que tirarse por los sembraos.
Más de lo que vale un peine aquí tú te va a enterar.
¡No me vengas con rebajas que la tela está cortá!
¿Qué habrá pasao en la carretera, que l'han cortao?".


2 comentarios:

  1. Excelente articulo, totalmente de acuerdo
    Felicidades por su blog.

    .

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  2. Gloria, muy buen artículo; así es desgraciadamente. Eso pasa por las transferencias en materia de educación.

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