En medio del creciente conflicto internacional -que desembocaría en la Primera Guerra Mundial-, Gabrielle Coco Chanel abrió una sombrerería en París, seguida de varias tiendas de ropa en Deauville y Biarritz, donde comenzó a utilizar lana -reservada hasta entonces para la ropa interior masculina-, con el fin de confeccionar prendas femeninas cómodas y estilosas. La idea de Chanel supuso un cambio respecto a la encorsetada "chica Gibson" y la mujer en kimono de Poiret, cuya influencia era todavía perceptible en la década de 1910. Sus diseños provocaron una moda pasajera de faldas de medio paso en Estados Unidos, dado que los diseñadores americanos malinterpretaron las estrechas líneas de la francesa.
En 1907, la estrella de la natación Annette Kellerman -conocida como la "sirena australiana"- ofreció su primer ballet acuático en Nueva York. Su bañador de una pieza escandalizó al público, acostumbrado a ver a las mujeres envueltas en incómodas prendas de baño. Al poco, Jantzen y Bentz Knitting Mills introdujeron nuevos modelos de baño. El atletismo estaba en auge. No en vano, la Converse Rubbet Shoe Company se fundó en 1908.
Entre tanto, la naciente industria del cine partía de Nueva York al clima cálido y al económico suelo de California del Sur, donde Hollywood pronto produciría numerosos largometrajes, haciendo de sus actores estrellas de un día para otro, e influyendo en las tendencias de moda en todo el mundo. Las bañistas de Mack Sennet aportaban una nota incitante a las comedias de los estudios Keystone, Gloria Swanson se consolidó como la reina del glamour de Hollywood y, con su cascada de tirabuzones rubios, Mary Pickford, la novia de América, fue la estrella de cine más popular y mejor pagada de la década.
En 1913, el "Armony Show" de Nueva York llevó a Estados Unidos el simbolismo, el impresionismo, el post-impresionismo, el neo-impresionismo y el cubismo. Si bien algunos se escandalizaban por el Desnudo bajando una escalera de Marcel Duchamp, y por las formas femeninas distorsionadas de Henri Matisse, otros se inspiraban en esas obras. Los grandes almacenes Wanamaker´s de Nueva York mostraban en sus escaparates moda que bebía del cubismo y la revista Vogue comenzó a incorporar "moda cubista" en sus ediciones.
Anuncios de moda de la década de 1910-1919:
Anuncios de moda de la década de 1910-1919:
No hay comentarios:
Publicar un comentario