Cogióme a tu puerta el toro,
linda casada,
no dijiste: ¡Dios te valga!
El novillo de tu boda
a tu puerta me cogió;
de la vuelta que me dio
se rió la aldea toda,
y tú, grave y burladora,
linda casada,
no dijiste: ¡Dios te valga!
Inspirándose en esta canción que Lope de Vega compuso para la obra Peribáñez y el comendador de Ocaña, José Antonio Ochaíta, la voz de la Alcarria, escritor teatral en sus comienzos y alumno de Miguel de Unamuno, compuso una copla monumental. ¿No era Ochaíta un auténtico poeta, a la altura de García Lorca, Juan Ramón Jiménez o Rubén Darío? Escribe Tomás Gismera Velasco que fue el propio Rafael de León quien le animó para introducirse en el mundo del folclore, firmando joyas como "El maletilla", "Cinco farolas" o la descarnada "La Guapa". "Cogióme a tu puerta el toro" fue, durante muchos años, un éxito cincelado en la voz apasionada de doña Concha Piquer.
El toro de siete hierbas
saltó por el burladero
y con la espada en la cruz,
se echó a la calle de en medio.
Patatuses de las damas,
¡ay! ¡que me mu que me muero!,
y el señor corregidor
colgadito en un alero.
Yo estaba en tu puerta, puerta,
puerta de mi pensamiento...
¡Ábreme que viene el toro
y trae la muerte en los cuernos!
Cogióme a tu puerta el toro,
linda casada, linda casada,
y no me quisiste abrir,
ni me quisiste decir,
caballero ¡Dios te valga!
Yo estaba en los hospitales
con el corazón partido;
lo que tú hiciste en un año,
el toro ¡que pronto lo hizo!
Que me den la Santa Unción,
con el aceite de olivo,
que tú no me llorarás,
porque ya tienes marido.
El corregidor de luto;
las damas entre suspiros...
Me pasarán por tu puerta
en una caja metido...
Ochaíta, natural de Jadraque, falleció en Pastrana en 1973, mientras recitaba el poema "Tengo la Alcarria entre las manos".
No hay comentarios:
Publicar un comentario