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sábado, 18 de julio de 2015

Apuntes sobre un primer viaje a España


España no se parece a nada de lo que me habían contado de ella. No pude echar más que un vistazo, pero mi vuelta al mundo me había demostrado que una mirada rápida es a veces más exacta que un viaje de estudios donde la mente se enreda. O entonces habría que vivir en un país para darse cuenta, a la larga, que la primera impresión era la válida.

España no sabe de avaricia. Tira su dinero por los balcones, maravillosos balcones de plantas verdes y de flores. Esto es una expresión consagrada. Quiero decir que España gasta y da todo lo que tiene. El resultado es que España es un país pobre que es rico y Francia es un país rico que es pobre.


[...] No soy muy sensible a lo pintoresco. Seguramente por eso enseguida percibí esa moral particular que el español opone a la moral propiamente dicha. España no es un país "poético". Es un poeta, en bloque, con todo lo que esto conlleva de individualismo. Pero su individualismo tiene de particular que es de masas y, por así decirlo, nacional.

La corrida es el espectáculo en donde la poesía española se expresa sin ningún tipo de coacción. Es un espectáculo y una ciencia. Belmonte ha convertido esta ciencia en una ciencia exacta donde Manolete tiene la función de Dios supremo. Tiene capillas por todas partes. Manolete es el ejemplo perfecto del torero. El público no le exige que dé más que los otros, sino que dé más de sí mismo. De este Dios de la plaza querían que hiciese milagros [...] En esta antigua tríada del torero, el toro y el público, el público tiene el papel más feroz.


[...] Edgar Neville nos acompaña en Andalucía. Sin su presencia, jamás hubiéramos sobrepasado las puertas prohibidas. No habríamos dado paseos nocturnos por La Alhambra, quizás hubiésemos sucumbido a las absurdas leyendas que cuentan que se come mal en España o que los hoteles son inhabitables porque nadan en aceite rancio. En España, tanto el alma como el cuerpo encuentran alimentos maravillosos. En cualquier albergue andaluz te sientes como en casa.

He visitado las bodegas de Jerez, que los franceses pronuncian Kérès o Llérès y los españoles Hhheré. Dibujé y firmé en una barrica de la bodega real. Bebí jerez de la época isabelina. Era como óxido de sable, hierro diluido en sangre. Parece ser que estas barricas negras contienen el oro y la sangre de los reyes que descansan en sarcófagos negro y oro de un nicho en El Escorial, superpuesto como las celdas de una colmena.

Jean Cocteau
Fragmento de "Apuntes sobre un primer viaje a España" (julio de 1954)

viernes, 13 de marzo de 2015

Las coplas de Susana


Susana, en egipcio, significa "flor de loto" y, en arameo", "lirio". Como la copla. Susana Díaz, candidata premamá, quiere mirar a los ojos a su hijo, el que aún lleva en el vientre, y contarle que los de su partido han dejado una Andalucía mejor que la heredada de nuestros padres. Así lo dijo durante la apertura de la campaña electoral que tuvo lugar en Almería. Y a mí aquello me sonó a copla. 

"A la nanita mi niño,
no llores ni tengas penas,
yo te daré mi cariño
porque seré una madre buena".
(Con los bracitos en cruz)


"Bordando pañales
pa su criatura,
lloraba Canales
la de Puerta Oscura".
(La niña de Puerta Oscura)



Susana dice que su niño, la flor de sus entrañas, se porta muy bien, "parece que quiere contribuir a la mayoría porque no me da fatiga, ni cansancio ni nada".

"¡Bendita sea la madre,
la madre que te ha parido!
Que solita se quedó
para darme a mí un jacinto
que alegraba sus jardines
y era gloria para el mío".
(Trece de mayo)


La futura madre Susana está en duermevela: PP, Podemos y Ciudadanos son tres clavos de amargura, como los hijos de la Gabriela. Cuentan que, arengando junto a la cuna, le dan las claras del día... ¡qué pena de suerte mía!

sábado, 11 de enero de 2014

Paseo por un pueblo blanco andaluz

El nombre de este precioso y cristalino pueblo de 950 habitantes proviene del árabe, "sufre", cuyo significado era "tributo". Ahora Zufre se encuentra protegido por la sierra de Aroche y por su patrona, la Virgen del Puerto.
 
 
Como tarde, es muy tarde
Como noche, es muy pronto.
Por la sierra Vicaria
andarán ya los lobos.
 
Corazón, no te vayas.
Niño, no salgas solo.
 
 
Por las cuatro callejas
cuatro cascos: el potro...
A estas horas el campo
lleno estará de ojos,
de lenguas misteriosas
que se callan a coro.
 
Por los caminos largos
que van hacia lo hondo
de la noche te quedas
pensativo y absorto.
 
 
Tú, desde las Almenas,
niño de calzón corto,
todavía contemplas
la tarde y su rescoldo.
La tarde interminable
que se cierra de pronto
como un gran abanico
de varillas de oro.
 
 
Yo me asomé a las Almenas
por ver cómo atardecía
a esa hora en la que apenas
arde el pabilo del día.
 
Abanico de la aurora,
despliega tu varillaje
y sobredora la hora
de la niebla en el paisaje
 
Tanto correr por el mundo,
buscando pan de trastrigo,
para hallarlo en el profundo
sosiego de este postigo.

 
En Zufre pasó su infancia y juventud el poeta Aquilino Duque, autor de los versos que jalonan este post. Et in Arcadia ego, que en latín significa algo así como "y yo también estoy en Arcadia", un país imaginario donde reina la alegría, la sencillez y la tranquilidad. Como en Zufre que, para redondear la perfección, cuenta además con una hermosísima plaza de toros.

miércoles, 3 de abril de 2013

Río sin retorno


"Río Rojo", "Río Salvaje", "Río sin retorno" y, quizás la mejor de todas, "Río Bravo". Sin estas películas, el género western sería como un caudal seco. Y, a pesar de sus confusos títulos -sobre todo cuando estás estudiando Historia del Cine-, nada tienen que ver entre ellas. Como digo, mi favorita es "Río Bravo", dirigida por Howard Hawks en 1959. Su guión es el reverso de otro western monumental: "Sólo ante el peligro" (Fred Zinnemann, 1952). En el primer caso, Hawks pone delante de nosotros a un sheriff fuerte y orgulloso (John Wayne) que, a pesar de no pedir ayuda para resolver sus numerosos problemas, es socorrido, de forma desinteresada, por tres amigos: un alcohólico (Dean Martin), un joven y diestro pistolero (Ricky Nelson) y un viejo cojo (Walter Brennan). En la película de Zinnemann, en cambio, un consternado sheriff (Gary Cooper) pide auxilio desesperadamente sin hallar respuesta entre sus conciudadanos.


Uno de los encantos de "Río Bravo" se esconde en la balada "My rifle, my pony and me", cantada a dúo por Martin y Nelson. El suave acompañamiento de la guitarra, la armónica y la voz aterciopelada del primero han provocado que, más de una madrugada, haya caído dormida escuchando esta nana-country desde la cama. Curiosamente, "My rifle, my pony and me" forma parte de la banda sonora de otro río: "Río Rojo" (1948), también dirigido por Hawks.
"The sun is sinking in the west
The cattle go down to the stream
The redwing settles in the nest
It's time for a cowboy to dream

Purple light in the canyons
That's where I long to be
With my three good companions
Just my rifle, pony and me".


Y hablando de música country y ríos, no puedo permitir que la corriente se lleve el "River of no return" de Tennessee Ernie Ford, tema principal del western homónimo de Otto Preminger (1954). La canción se hizo tremendamente popular merced a la actuación de una sensual Marilyn Monroe rodeada por buscadores de oro.

There is a river called “The river of no return”,
sometimes it's peaceful and sometimes wild and free.
Love is a traveler on “The river of no return”,
swept on for ever to be lost in the stormy sea.



Mientras tanto, en la primavera andaluza, el Guadalquivir continúa bravo, salvaje, desbordado y casi sin retorno. Contemplándolo desde la casa del vaquero, entran ganas de rodar un western en sus orillas.


"Las lluvias de abril caben todas en un barril, pero si el barril se quiebra,
no caben en el mar ni en la tierra" (refrán español).

jueves, 28 de febrero de 2013

Día de Andalucía o de las "chuminás"


"Hoy estoy guarnía. Y lo que más me gusta de estar guarnía es poder decir que estoy guarnía... Es una expresión que me encanta... como tantas otras que son tan nuestras. Como cuando una se harta de comer y acaba engollipá (o engoñipá) o cuando riegas las macetas más de la cuenta y las dejas enguachinás... Yo nunca pido churros, sino calentitos... de niña nunca iba a las atracciones, sino a los cacharritos... a los amigos pesados se les dice jartible y cuando me tangaba del colegio lo que hacía era rabona... (qué peyas ni peyas). A lo largo de mi vida he conocido a más apollardaos que tontos y a más esnortaos que despistados... pero nunca a ningún antipático, sólo a malajes o saboríos... La mentira no es mentira sino engañifa. Aquí lo mucho es una jartá o una pechá, y lo poco es una mijita... y la gente no pasea, da vuerta... Lo que está muy sucio está empercochao y lo que limpias a fondo lo dejas escamondao o niquelao... Si se te va la olla te quedas majarón, y si das mucho la lata te llaman pejiguera... Los borrachos, que son papaos, no deambulan, sino que dan camballás... y la gente no odia la mentira, sino el falserío... Lo roto está descuajaringao y lo pasado de fecha, revenío... los cobardes son jiñaos y lo muy visto está mu manío... (y que conste que lo que acabo de soltar no es ninguna tontería, sino una chuminá)".


El 28 de febrero, en recuerdo del referendum de 1980, se celebra el Día de Andalucía. Otra chuminá autonómica para añadir a la lista. Cuando estaba en el colegio, cada 28 de febrero, nos regalaban un Plastidecor verde y nos mandaban colorear la bandera de Andalucía. Parajódicamente, nunca nos dieron una cera roja y otra amarilla para pintar la de España... Minimeces. Hasta los 15 años tampoco estudié una capital, un río, una cordillera o un cabo que estuvieran más allá de la frontera andaluza... El mundo acababa en Sierra Morena. A partir de ahí, la vida era un agujero negro.


Otra tradición escolar del 28 de febrero consistía en cantar el himno de Andalucía con las lágrimas asomando en recuerdo de Blas Infante. Jamás comprendí la letra: si los andaluces pedíamos libertad y tierra, ¿no podíamos encontrar un terrenito majo más allá de Sierra Morena? En Murcia, sin ir más lejos. Y lo de "andaluces, levantaos" era un cuento de mucha consideración: ¡si nos repele madrugar! Pero todos estos pensamientos infantiles debía guardármelos so pena de recibir una clase extra de Patrimonio Artístico Andaluz.


A Andalucía, Carlos Cano le compuso una canción, mucho más hermosa, por supuesto, que la escrita por Blas Infante, y que debería ser su verdadero himno: "Verde, blanca y verde".


El repertorio de Carlos Cano está cuajado de himnos a Andalucía. ¡Te quie´ir ya, Blas Infante y toda su casta de adoctrinadores! Que pongan en los colegios "Andalucía Superstar", "La murga de los currelantes" o "Verigüe fandango". ¡Vamos que nos vamos!

"¡La Reina Superstar! ¡Viva Andalucía Libre!
-alimento principal-, que viene pidiendo tierra y la tierra abandoná.
Ay, palomas que van a Cai y Cai como un palomar.
¿Qué habrá pasao en la carretera?
¿Qué habrá pasao?
Que pa ir a Cai hay que tirarse por los sembraos.
Más de lo que vale un peine aquí tú te va a enterar.
¡No me vengas con rebajas que la tela está cortá!
¿Qué habrá pasao en la carretera, que l'han cortao?".